Más de 950 de los cerca de mil funcionarios de la Municipalidad de Las Condes reportaron horas extras el año pasado. De ellos, el 61% superó la cantidad de horas extraordinarias que la ley permite en el sistema público. Lideran la lista la socióloga Javiera Benítez Gibbons, directora de Seguridad Pública, y el ingeniero civil Juan Francisco Reyes Salgado, director de Desarrollo Comunitario y ex candidato a concejal por la UDI. Cada uno recibió cerca de 33 millones de pesos anuales por pagos de jornada extraordinaria. Este año, Reyes reportó haber trabajado horas extras mientras que en sus redes sociales publicaba fotos estando en la playa.
Realizar horas extras laborales en la Municipalidad de Las Condes parece ser la norma. Al analizar las planillas de remuneraciones del personal, América Transparente descubrió que entre enero de 2019 y julio de 2021, la municipalidad gastó 18.800 millones de pesos en horas extraordinarias.
Durante el primer año de la pandemia, nueve de cada diez funcionarios de planta recibieron pagos por este concepto. De ellos, el 68% superó el límite legal, que fija 40 horas extras diurnas como máximo al mes, recibiendo en promedio pagos adicionales por 800 mil pesos mensuales por persona. En el caso de los funcionarios a contrata, el 86% informó horas extras y casi la mitad superó el límite legal.
Javiera Benítez Gibbons, directora de Seguridad Pública de Las Condes, registró haber trabajado 1.831 horas extras el año pasado. Benítez es funcionaria de la municipalidad desde 2017 y tiene un contrato de planta a tiempo completo. En diciembre de 2020, su remuneración bruta superaba los 6,6 millones de pesos. Durante siete meses, reportó haber trabajado 70 horas extras durante el día y 90 de noche o en festivos. La suma arroja jornadas laborales de lunes a viernes de más de 16 horas diarias. De todos los trabajadores de la municipalidad, ella fue la funcionaria que más dinero recibió por concepto de horas extras durante 2020, lo que le generó un ingreso adicional de más de 34,7 millones de pesos al año.
Como Benítez, cerca de 940 funcionarios de la Municipalidad de La Condes superaron la cantidad de horas extras que la ley permite realizar en el sistema público. Así, el pago de más de 1 millón de horas extraordinarias durante el primer año de la pandemia le costó a la Municipalidad unos 7.800 millones de pesos (mil millones más que en 2019). Las actas del concejo comunal muestran que ese mismo año el municipio destinó cerca de 7 mil millones para programas sociales creados en contexto de pandemia: cifra menor a la transferida para el pago de horas extras.
La segunda persona que más dinero recibió por horas extras fue el ingeniero civil Juan Francisco Reyes Salgado, director de Desarrollo Comunitario y ex candidato a concejal por la UDI. Él reportó 1.751 horas extras en el año y por ello recibió una remuneración adicional anual de casi 33 millones de pesos.
Reyes habría trabajado más de 13 horas diarias, incluidos los fines de semana, según el registro de entrada y salida al que accedió América Transparente vía Ley de Transparencia. Durante febrero de este año, el horario del director de Desarrollo Comunitario fue siempre el mismo, ni un minuto más ni menos: de 8:30 a 21:50 todos los días, incluidos los sábados y dos domingos.
Según el registro de la Municipalidad, el lunes 1 de febrero Reyes salió de vacaciones hasta el viernes 5. Al día siguiente, el sábado 6, informó haber trabajado nuevamente de 8:30 a 21:50. Ese día subió tres fotos a su cuenta de Instagram de vacaciones con sus hijas. Aunque tras su regreso quedaban sólo 15 días hábiles, el funcionario reportó las mismas 80 horas extras nocturnas o festivas y las más de 50 extras diurnas que informó todos los meses de 2020 y el primer semestre de 2021. Reyes dijo haber trabajado 131 horas extras en tres semanas, superando el límite mensual legal.
Según el mismo registro, el sábado 20 de febrero Reyes también comenzó a trabajar a las 8:30 y terminó su jornada a las 21:50. Ese mismo día, subió una foto a Instagram paseando a su perro en un parque, junto a mensajes referidos a su campaña para concejal. Por supuesto, es posible que el paseo haya ocurrido en otro momento.
En diciembre de 2020, hubo 398 funcionarios de planta cuyas horas extras representaron al menos un tercio de su sueldo. Y 160 trabajadores aumentaron su remuneración en un 40% gracias al pago por este concepto. Pero el fenómeno no es exclusivo de la pandemia: las cifras reportadas se mantienen constantes al menos entre enero de 2019 y junio de 2021.
En los primeros seis meses de este año, Las Condes ya había gastado $4 mil millones en horas extraordinarias. El equipo de Comunicaciones de la Municipalidad de Las Condes fue contactado el viernes a las dos de la tarde por correo electrónico solicitándole una entrevista para este reportaje. La respuesta llegó a las 20:40 y en ella se explica que no puede pedírsele al administrador municipal que esté disponible a esa hora. La encargada de Comunicaciones informó que en caso de publicar el lunes, la Municipalidad podría dar la entrevista. Sin embargo, América Transparente mantuvo la decisión de publicar hoy. Informada al respecto, la encargada de prensa no respondió a la solicitud de entrevista.
Libros de asistencia
En 2017, la Municipalidad de Las Condes publicó el procedimiento de sistema de control y registro de asistencia para sus funcionarios. Allí estableció que la jornada laboral ordinaria corresponde a 44 horas semanales, con un horario oficial de ingreso fijado a las 08:30 y de salida a las 17:33, incluyendo 45 minutos para colación. Las horas extraordinarias diurnas son aquellas trabajadas entre 17:34 y 21:00 en días hábiles, y las nocturnas entre las 21:00 y las 7:00 am. Las festivas, corresponden a sábados, domingos y festivos entre 00:00 y 24:00 hrs.
Todas ellas deben ser solicitadas por el director del departamento correspondiente al Administrador Municipal, quien debe aprobarlas a más tardar 15 días antes de que comiencen a realizarse. Esas solicitudes deben estar fundadas en un programa de trabajo que acredite que las tareas a realizar son “impostergables” y “relacionadas con el quehacer municipal”.
El procedimiento establecido por la Municipalidad para controlar los ingresos y salidas, determina que el supervisor debe verificar que los horarios correspondan a lo efectivamente realizado y que debe haber una persona a cargo de digitar los registros de forma semanal en el Sistema de Asistencia computacional.
Por ejemplo, en enero de 2021, Juan Francisco Reyes Salgado, director de Desarrollo Comunitario, solicitó al administrador municipal la autorización de horas extras para su equipo durante el mes de febrero.
Las horas fueron autorizadas bajo la misma justificación de cada mes: que la Municipalidad “trabaja, de manera habitual y permanente, las 24 horas del día durante los 7 días de la semana” y que a sus labores habituales se habían sumado “un sinnúmero de otras responsabilidades, obligaciones y actividades en los últimos años, las que han debido ser absorbidas por el mismo personal, el que se ha mantenido invariable en cuanto a su número durante las últimas décadas”. También se plantea de forma recurrente que en los últimos años han tenido “cada vez mayores exigencias de la comunidad” y que los servicios comunales requieren de “tareas impostergables, cuya correcta satisfacción los convierte en indispensables para nuestros vecinos, particularmente exigentes, y cuya omisión resulta a estas alturas impensable”.
Así, se aprobaron horas extras para 17 funcionarios sumando 920 horas diurnas y 969 festivas o nocturnas sólo para su equipo. El funcionario al que se le autorizaron más horas extras fue Reyes –pese a que ese mes se tomó vacaciones–, y él mismo quedó a cargo de la “supervisión, control y fiscalización del cumplimiento de las horas trabajadas”, según consta en el decreto. Ese mes, Reyes reportó 50 horas extras diurnas y 90 horas festivas o nocturnas.
Cabe destacar que según el marco normativo, los funcionarios sólo pueden exceder la limitación de 40 horas extras cuando ocurran “fenómenos naturales o calamidades públicas” que hagan “imprescindible trabajar un mayor número de horas extraordinarias”.
El procedimiento de registro de horas consiste en firmar un libro de asistencia que debe ser supervisado por los directores y jefes de departamento, para que no haya “enmendaduras, remarcaciones y borrones en el registro de entrada y salida”. Sin embargo, una auditoría de Contraloría de 2017, determinó que ese sistema de control horario “no permite verificar el cumplimiento efectivo de la jornada laboral” dada la posibilidad de “manipular su información, tal como se comprobara en las validaciones efectuadas”.
En abril de 2020, Contraloría emitió un dictamen estableciendo que no era “jurídicamente admisible” pagar horas extraordinarias cuando los funcionarios estuvieran en modalidad de teletrabajo, ya que no es posible aplicar las medidas de control de jornada laboral que se implementan en el trabajo presencial.
En el acta del concejo comunal de julio de ese año, quedó registrado que el entonces alcalde Joaquín Lavin, le pidió al administrador municipal, Ignacio Jaramillo, que diera cuenta de cómo estaba funcionando la Municipalidad por la pandemia y pidió conocer el porcentaje de personal que estaba realizando teletrabajo. Jaramillo informó que desde mayo había dos decretos: uno sobre aislamiento domiciliario, referido al personal que no podía trabajar a distancia, como conductores o guardias, y otro para teletrabajo. Sumando ambas categorías había 110 funcionarios. Jaramillo aclaró que había “unidades que se han mantenido trabajando durante todo el día, otras que realizan jornadas más cortas y otras que realizan turnos diarios”. Ese mes, se pagaron 88.144 horas extras.
En agosto de 2020, el diputado DC Gabriel Ascencio envió un oficio de fiscalización a Contraloría para que se pronunciara sobre la legalidad del pago de horas extras en Las Condes durante la administración del exalcalde Lavín. El organismo se encuentra investigando.